Jaime Manrique Ardila
El poeta como lector
Un periplo entre el Caribe, Bogotá y Estados Unidos, y la inmersión en los anaqueles de una biblioteca dispar, han hecho que la del barranquillero sea una escritura bífida. Entre sus epígonos y traducciones se encuentran las bases de una patria flotante.
POR Hugo Chaparro Valderrama

ACERCA DEL AUTOR

Es director de los Laboratorios Frankestein, donde dedica sus días a la escritura poética, narrativa y ensayística, en especial sobre cine, música y literatura.